Rosa María Calaf recibe el premio «Comunicar con valores».
En el Alma Mater Museum nos gusta seguir siendo escenario de historias del presente, y hoy hemos podido ser partícipes de un momento único: la entrega del premio “Comunicar con valores”, que en su primera edición se ha desarrollado en el Salón del Trono del palacio arzobispal.
Primero ha tenido la oportunidad de visitar el museo, con un guía privilegiado: nuestro director científico D. Domingo Buesa, conociendo así las dependencias más antiguas de este palacio, en donde vivieron codo con codo los reyes de Aragón junto al prelado desde el siglo XII. Finalmente, en el Salón del Trono hemos sido testigos de la entrega del premio, contando con la presencia del arzobispo D. Vicente Jiménez Zamora.
Este premio ha sido creado por la Archidiócesis de Zaragoza con el fin de “reivindicar el inmenso poder de la comunicación social para promover la felicidad del ser humano y su realización personal”. Y en este caso, no cabe duda que Rosa María Calaf, la corresponsal más veterana de toda la TVE, con más de 37 años de trayectoria. En su trabajo destaca la presencia de unos valores éticos y el interés por defender los derechos humanos, muy por encima de cualquier interés político o ideológico.
Ha sido un privilegio poder escuchar el testimonio y la valoración de una persona que ha recorrido el mundo, conociendo de primera mano la crueldad y las grandes lecciones que puede llegar a albergar. Por esto mismo tienen tanto valor sus palabras, fruto de la experiencia y un juicio crítico indudables.
Bajo su punto de vista la principal función del periodismo es la búsqueda de la verdad o, al menos, la veracidad, dando a conocer lo visible de lo invisible. En su exposición ha hecho hincapié en la importancia de la información para conseguir la libertad, algo que en ocasiones no es del todo fácil, ya que en la actualidad, como bien nos ha recordado, cada vez se favorece más lo que impacta sobre lo que importa.
El relación a esto último, Calaf ha hecho una reflexión sobre cómo se usa el periodismo en estos momentos, subrayando que se está cayendo en el error de verlo como un negocio. Bajo su punto de vista esto supone un problema grave, ya que “recibir buena información es un derecho, y darla, un deber”. En su discurso ha reforzado la idea de que el conocimiento y la memoria son fundamentales para el bien común, y para ello es necesario usar el vocabulario correctamente, ya que “la información tóxica desinforma”.
No obstante, Rosa María Calaf reconoce que el periodismo no ha sido siempre perfecto en el pasado, ya que cada época tiene sus controversias. Pero haciendo referencia al presente que vivimos, como recomendación a las nuevas generaciones de periodistas, les ha recordado que “el periodismo tiene un componente de compromiso y responsabilidad social fundamentales.” Y que, aunque con la celeridad que impone la actualidad en el día a día, no hay que dejar de lado el sentido crítico al elaborar las noticias.
En esta primera edición el jurado lo han conformado seis profesionales del ámbito de la comunicación y cuenta con la presidencia honorífica del arzobispo de Zaragoza, monseñor Vicente Jiménez Zamora. Los miembros del jurado son Ricardo Pereda, director de DIRCOM Aragón; Ángel Herrero, director regional de COPE Aragón; Encarna Samitier, subdirectora de Heraldo de Aragón; Juan Pablo Artero, profesor de la Universidad de Zaragoza; José Juan Verón, director del grado de Periodismo de la Universidad San Jorge, y José Antonio Calvo, delegado de Medios de la Archidiócesis de Zaragoza.
Ahora sólo queda esperar seguir aprendiendo de testimonios como el de esta gran mujer y no olvidar ni en nuestros actos ni en nuestras palabras el sentido ético que tanta importe es en cualquier momento.